EPN en IBERO MAYO 2012






Fue un acto genuino y honesto, de aspecto más bien espontáneo, que llevó a cabo un sector importante del cuerpo estudiantil de tal institución. recurrió a los gritos en un intento por romper con los marcos establecidos por los principales medios de comunicación entorno a la figura de este candidato y del proceso electoral. En lugar de responder a las protestas, de entablar un diálogo con una voz que luchaba por ser escuchada, estos optaron por sofocarla. Utilizando su avasalladora maquinaria y enorme alcance, una diversidad de medios publicaron información manipulada, e incluso falsa, sobre lo que había ocurrido. Se negaron a darle su debido lugar y convirtieron la nota de una queja política legítima (y admirable) en la de un evento de “porros acarreados” por fuerzas políticas externas, tratando así de quitarle todo rastro de legitimidad.